Otro grupo de reglas en el juego del Samsara, son las relativas a los arahants, que son muy especiales. En realidad, con la libertad coartada debido a su inmensa sabiduría, hay cosas que físicamente no pueden hacer:
“Esto es imposible e inconcebible, monjes, que la persona consumada en la visión privase a su madre de vida…
Un arahant no puede matar a su madre.
“Esto es imposible e inconcebible, monjes, que la persona consumada en la visión privase a su padre de vida…
Tampoco a su padre…
“Esto es imposible e inconcebible, monjes, que la persona consumada en la visión privase a un arahant de vida…
Ni a otro arahant.
“Esto es imposible e inconcebible, monjes, que la persona consumada en la visión, con el odio en la mente, derramase la sangre del Tathagata…
Ni herir al Buddha. Es interesante hacer notar que añade “con el odio en la mente”, así salva a Cunda el herrero, quien le dio de comer la delicadeza de cerdo lo que acabó con su vida.
“Esto es imposible e inconcebible, monjes, que la persona consumada en la visión crease un cisma en el Sangha…
Este es un punto muy interesante. Los cismáticos son personas corrientes, ignorantes, alienados. Aquí quiero hacer hincapié en el primer cisma, que se produce a partir del primer concilio. El Primer Concilio Budista fue realizado poco después del parinibbana del Buddha con el apoyo del rey Ayata Shatru en la cueva de Las Siete Hojas cerca de Rajagriha en Magadha, India. Alrededor de quinientos monjes participaron bajo el liderazgo de Mahakassapa. Se dice que Ananda recitó los suttas y Upāli recitó el Vinaya, o reglas monásticas de disciplina, a preguntas de Mahakassapa. Los otros confirmaron la veracidad de su recitación y luego la recitaron al unísono, estableciendo entonces una versión definitiva. El número quinientos viene a significar “muchos”. Las veces que aparece el número y se hace una relación exhaustiva, no salen más de 120 o 130, como la relación de Paccekabuddhas. Cuando acabaron, fueron a buscar a los venerables Purana, Gavampati y quinientos monjes más que no participaron en la reunión, exigiéndoles sometimiento a la nueva doctrina pactada. Ante tales exigencias, los rechazaron y prefirieron mantener la palabra del Buddha tal como ellos la recordaban y no la “nueva” palabra. Esto constituye un cisma sin la menor duda. ¿Pero si no es posible que alguien dotado de la visión puede hacer un cisma, como fue esto posible? Ni Mahakassapa, ni Ananda, ni Upala, los cismáticos, estaban dotados de la visión. No estaban iluminados. Respecto a Ananda ya se ve explícitamente en el Parinibbana sutta, en las recomendaciones finales del Buddha a su asistente para que logre la iluminación. De Mahakassapa ni de Upāli existe referencia alguna en los suttas que indiquen que estaban iluminados, antes, al contrario. Por razones que ahora se hacen evidentes, se ha tratado de poner a Mahakassapa a la altura de Sariputta y Moggallana, los dos grandes discípulos del Buddha, a los que éste añoraba, como puede leerse en SN 47.11 Ukkacela Sutta. Y no solo eso, Mahakassapa aparece como el santo patrón de la secta Mahāyana y a menudo se le representa en estatuas junto a Ananda, cada uno de pie a ambos lados de Buda. O sea, los dos cismáticos, uno al lado del otro. Según la tradición del budismo Zen, Mahakassapa fue “el primero en recibir la transmisión del Dharma directamente de Buda Gautama”. El Zen pretende llevar a sus seguidores ideas similares a las mencionadas por el Buda Sakyamuni en su sermón de la flor, cuando sostuvo una flor blanca en unas de sus manos y solo Mahakassapa fue capaz de admirarla. Se dice que Mahakassapa sonrió lánguidamente, y el Buda lo eligió por haber sido el único que había entendido realmente el significado y, por lo tanto, era digno de ser su sucesor. Las palabras que Buda Gautama dirigió a Mahakassapa son descritas de la siguiente manera: “Poseo el verdadero ojo del Dharma, la mente maravillosa de Nirvana, la verdadera forma de la No-forma, la puerta sutil del Dharma que no se basa en palabras o letras, sino es una transmisión especial fuera de las escrituras. Esta confío a Mahakassapa.” Al final, Mahakassapa se salió con la suya, y aunque el Buddha le negó la sucesión, una buena parte de los budistas le tienen como el sucesor. Pero, esto podría ser una anécdota sin mayores consecuencias. Sin embargo, no lo es. El Buddha tuvo la mala ocurrencia de comentar con Mahakassapa como se podía falsificar el Dhamma: “…sin reverencia y deferencia hacia el entrenamiento; Viven sin reverencia y deferencia hacia la concentración”. Sorprende que lo más importante en el sistema del Buddha, la meditación, no viene en los textos sino en forma de una pésima caricatura de instrucciones que son imposible de seguir. Así Mahakassapa se prevenía de que nadie pudiera sacarle del liderazgo de su nueva secta. ¿No te ha extrañado nunca que, en más de medio millón de palabras, no se dediquen más que dieciocho líneas a (no) explicar cómo se medita? Y no solo eso: hay análisis lógicos del sistema del Buddha, como los que vimos en la entrada anterior, es decir, las tres características dependiendo de la condicionalidad, y esta de la información y ésta de la ignorancia, que dan una idea perfecta, lógica y entendible por cualquiera que no aparecen en los textos, lo que resulta sorprendente. Como consecuencia, relacionar la impermanencia (anicca) con el no-yo (anatta) solo puede hacerse a fuerza de fe. Así es muy común ver a miles de theravadines sentados durante horas considerando que la respiración es impermanente y no-yo. Así durante años y años, creyendo por fe, que si lo entienden se iluminan… Y, si se tiene que usar la fe, es porque ese dhamma es falso. El Dhamma del Buddha está muerto desde el Primer Concilio. Muerto matado. Saṃyutta Nikāya 47 Discursos conectados sobre los establecimientos de la atención plena
Ukkacela
En una ocasión el Bendito estaba viviendo entre los Vajjianos en Ukkacela en la orilla del río Ganges, junto con un gran Sangha de bhikkhus, no mucho después de que Sāriputta y Moggallana hubieran alcanzado el Nibbāna final. Ahora en esa ocasión el Bendito estaba sentado al aire libre en medio del Sangha de bhikkhus. Entonces el Bendito, habiendo examinado el silencioso Sangha de bhikkhus, se dirigió a los bhikkhus así: «Bhikkhus, esta asamblea me parece vacía ahora que Sāriputta y Moggallana han alcanzado el Nibbāna final. Esta asamblea no estaba vacía para mí antes, y no tenía ninguna preocupación por cualquier barrio Sāriputta y Moggallana estaban morando en. «Los Arahants, perfectamente Iluminados, que surgieron en el pasado también tenían un par de discípulos tan supremos como yo en Sāriputta y Moggallana. Los Arahants, los Perfectamente Iluminados, que surgirán en el futuro también tendrán un par de discípulos tan supremos como los que tuve en Sāriputta y Moggallana. «Es maravilloso, bhikkhus, por parte de los discípulos, es asombroso por parte de los discípulos, que actúen de acuerdo con las instrucciones del Maestro y cumplan con sus admoniciones, que serán queridos y agradables a los discípulos. Cuatro asambleas, para que sean reverenciadas y estimadas por ellos. Es maravilloso, bhikkhus, por parte del Tathagata, es asombroso por parte del Tathagata, que cuando tal pareja de discípulos ha alcanzado el Nibbāna final, no hay dolor o lamento en el Tathagata. «¿Cómo, bhikkhus, se debe obtener aquí: ‘¡Que lo que nace, venga a ser, condicionado y sujeto a la desintegración no se desintegre! ‘? Eso es imposible. Es como si las ramas más grandes rompieran un gran árbol que poseía el duramen: así también, bhikkhus, en el gran Sangha de bhikkhus de pie poseído de duramen, Sāriputta y Moggallana han alcanzado el Nibbāna final. ¿Cómo, bhikkhus, se puede obtener aquí: ‘¡Que lo que nace, venga a ser, condicionado y sujeto a la desintegración no se desintegre!’ Eso es imposible. «Por tanto, bhikkhus, habitan con ustedes mismos como su propia isla, con ustedes mismos como su propio refugio, sin otro refugio; Habitan con el Dhamma como su isla, con el Dhamma como su refugio, sin otro refugio … como en el … Aquellos bhikkhus, ya sea ahora o después de que me haya ido, que viven con ellos mismos como su propia isla, Con ellos mismos como su propio refugio, sin otro refugio; Con el Dhamma como su isla, con el Dhamma como su refugio, sin ningún otro refugio – son estos bhikkhus quienes serán para mí los más importantes de los que están interesados en el entrenamiento «. Saṃyutta Nikāya 16 Discursos conectados con Kassapa
La Falsificación del Dhamma Verdadero
Así he oído. En una ocasión, el Bendito estaba viviendo en Sāvatthī en la Arboleda de Jeta, el Parque de Anathapindika. Entonces el Venerable Mahakassapa se acercó al Bendito, le rindió homenaje, se sentó a un lado, y le dijo: «Venerable señor, ¿cuál es la razón, ¿cuál es la causa, por qué anteriormente había menos reglas de entrenamiento, pero más bhikkhus se establecieron en el conocimiento final, mientras que ahora hay más reglas de entrenamiento, pero menos bhikkhus se establecen en el conocimiento final? “Esa es la forma en que está, Kassapa. Cuando los seres se están deteriorando y el verdadero Dhamma está desapareciendo hay más reglas de entrenamiento, pero menos bhikkhus se establecen en el conocimiento final. Kassapa, el verdadero Dhamma no desaparece mientras no haya surgido una falsificación del verdadero Dhamma en el mundo. Pero cuando una falsificación del verdadero Dhamma surge en el mundo, entonces el verdadero Dhamma desaparece. «Así como, Kassapa, el oro no desaparece mientras el oro falsificado no ha surgido en el mundo, pero cuando el oro falsificado surge entonces el oro verdadero desaparece, por lo que el verdadero Dhamma no desaparece mientras una falsificación del verdadero Dhamma tiene No surgido en el mundo, pero cuando una falsificación del verdadero Dhamma surge en el mundo, entonces el verdadero Dhamma desaparece. «No es el elemento de tierra, Kassapa, el que hace desaparecer el verdadero Dhamma, ni el elemento de agua, ni el elemento de calor, ni el elemento de aire. Es la gente sin sentido que surge aquí mismo quien hace que el verdadero Dhamma desaparezca. «El verdadero Dhamma no desaparece de repente en la forma en que un barco se hunde. Hay, Kassapa, cinco cosas perjudiciales que conducen a la decadencia y desaparición del verdadero Dhamma. ¿Cuáles son los cinco? Aquí los bhikkhus, las bhikkhunis, los seguidores laicos varones, y las seguidoras laicas siguen morando sin reverencia y deferencia hacia el Maestro; Viven sin reverencia y deferencia hacia el Dhamma; Viven sin reverencia y deferencia hacia el Sangha; sin reverencia y deferencia hacia el entrenamiento; Viven sin reverencia y deferencia hacia la concentración. Estos, Kassapa, son las cinco cosas perjudiciales que conducen a la decadencia y desaparición del verdadero Dhamma. «Hay cinco cosas, Kassapa, que conducen a la longevidad del verdadero Dhamma, a su no división y no desaparición. ¿Cuáles son los cinco? Aquí los bhikkhus, las bhikkhunis, los seguidores laicos masculinos, y los seguidores laicos femeninos viven con reverencia y deferencia hacia el Maestro; Ellos viven con reverencia y deferencia hacia el Dhamma; Viven con reverencia y deferencia hacia el Sangha; Viven con reverencia y deferencia hacia el entrenamiento; Viven con reverencia y deferencia hacia la concentración. Estos, Kassapa, son las cinco cosas que conducen a la longevidad del verdadero Dhamma, a su no división y no desaparición «.
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