La expansión del vacío o la condicionalidad de la métrica.

En el Samsara todo está condicionado. Hasta lo inimaginable. A menudo nos imaginamos el Universo en expansión, donde se puede medir la distancia entre dos puntos tantas veces como queramos, porque esa distancia es fija, porque imaginamos que la métrica es absoluta, que la métrica no está condicionada. Pues no. La métrica está condicionada. La métrica sólo se aplica al Samsara y, como tal, está condicionada. La idea de inmutabilidad de una regla, que puede medir, no es más que un concepto nada real. Intuitivo pero no real. La distancia está condicionada por el tiempo, que ya vimos que, a su vez, está condicionado por la masa, y …. Y eso es así porque el vacío se expande… Los objetos masivos en el Universo, que no son condicionados por otros, están fijos en su distorsión del espacio-tiempo, solo aquellos objetos menos masivos  en sus alrededores se moverán. La expansión del Universo se debe a la expansión del vacío entre objetos. Ya vimos que el vacio cuántico no es un vacío absoluto, sino que contiene la energía equivalente a tres átomos de hidrógeno por metro cúbico. Cantidad suficiente para condicionar y condicionarse. Esa condicionalidad entre objetos se expande teniendo energia suficiente para rellenar esos espacios, haciendo que todo el Universo se expanda. Y es otra condición del vacío cuántico: se expande, como una tela de caucho jalada por todas partes, los objetos masivos están atrapados por su propia distorsión, y fijos, mientras los espacios entre ellos aumentan. Si mides dos puntos medirás una distancia. Un instante después será otra. Impermanencia y condicionalidad hasta de las coordenadas. En fin, todo en el Samsara es así. Si no te gusta, libérate.

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